No ha hecho más que comenzar el año y empezamos a tener noticias de los primeros asesinatos por violencia machista en España. Enseguida empiezo a preguntarme si de verdad esta terrible realidad va a cambiar de una vez, si esta lacra social dejará de ser actualidad y si algún día las desigualdades sociales dejarán de ser algo por lo que tengamos que luchar.
En esta situación llega a mis manos un documental que me provoca una enorme indignación e impotencia y que me abre los ojos a la terrible realidad que viven también las mujeres de otros países del mundo.
El documental llamado "Cartography of Loneliness" ("Cartografía de la soledad") es el primero por los realizados por la directora y fotógrafa granadina Nocem Collado. A través de sus documentales, de sus fotografías y artículos, intenta plasmar la situación de las mujeres en los países por los que viaja, fundamentalmente países asiáticos.
En "Cartography of Loneliness" se recogen testimonios de mujeres viudas de India, Nepal y Afganistán. En estos países, muchas mujeres son obligadas a casarse siendo niñas (incluso con 2 y 3 años de edad) por lo que enviudan a temprana edad. La situación en la que quedan la mayoría de estas viudas es inhumana: muchas deben vivir en la calle porque son rechazadas por sus propias familias, ya que son consideradas un mal augurio o una maldición, se las despoja de todas sus posesiones y por supuesto carecen de cualquier tipo de protección social, ni ellas ni sus hijos. Además, deben rapar sus cabezas, vestir con ropa blanca como señal de luto, marcar su frente con ceniza y no llevar ningún tipo de joya o adorno. Muchas se ven obligadas a mendigar o a prostituirse. En países como Afganistán son obligadas además a abandonar a sus propios hijos para que la familia del difunto se haga cargo de ellos. Sufren así una doble discriminación: por ser mujeres y por ser viudas.
Sólo en India existen más de 45 millones viudas y en Nepal el 50% de la población lo es. En este último país, hace unos 80 años, existía una práctica cultural llamada "sati" por la que las mujeres viudas debían ser quemadas vivas en la misma pira funeraria del difunto. Hoy en día esta práctica está prohibida, aunque sigue conservando su significado porque, como se dice en el documental "la mujer sigue viva físicamente pero está muerta socialmente".
Aunque en muchos de estos países existen ya leyes que prohiben el matrimonio de las menores, la realidad indica que estas leyes se incumplen constantemente y prueba de ello es la gran cantidad de viudas jóvenes que existe.
En los últimos años, en la mayor parte de estos países han surgido asociaciones de ayuda a las viudas como "Guild of Service" en India, "Women for Human Rights" (WHR) en Nepal o HAWCA, en Afganistán. A través de ellas se intenta no sólo proporcionarles comida, atención médica o refugio, sino también cambiar sus mentalidades y capacitarlas para llevar sus vidas de manera independiente.
Me quedo pensando en cómo vive la mujer en Europa, donde los logros en igualdad son cada vez mayores, aunque sigue siendo evidente que falta mucho por conseguir. Aun así, no puedo dejar de sentirme una "privilegiada" cuando pienso en las mujeres de estos países, obligadas a casarse de niñas, cuánto más pequeñas mejor porque ello supone pagar menos dote, cosificadas al máximo, anuladas como seres humanos y en la terrible situación social en la que quedan para el resto de sus vidas cuando enviudan, culpadas por algo que ni siquiera eligieron, repudiadas por sus familias y por la sociedad. Solas.
Si quieres ver el documental completo, pincha aquí .
Claudia Pérez Zapata, colaboradora del grupo Aequitas25.
No conocía esta cultura. Sí sabía que existían mujeres que eran casadas en una temprana edad, pero no me imaginaba que al quedar viudas se convirtieran en “despojos de esa sociedad”.
ResponderEliminar¿Cómo puede tratarse a las mujeres viudas de una cultura como muertos vivientes? Tal y como dice Claudia Pérez, en Europa nos tenemos que sentir “privilegiados” si comparamos los derechos de las mujeres en otros países con los del nuestro. ¿Por qué pone ese privilegiados entre comillas? Porque todavía queda muchísimo por avanzar. La sociedad no es ni mucho menos igualitaria pero al menos estamos más desarrollados que otros países como en este caso India, Nepal o Afganistán.
Según el documental, en Nepal existió una práctica por la que las mujeres viudas debían ser quemadas vivas junto con el difunto, es decir, que la mujer no importaba nada si ya no estaba con su esposo, era una parte más del marido, una propiedad. Aunque esa práctica ya está prohibida, el rol de una mujer que ha enviudado es infrahumano. Es intolerable que una mujer por haber perdido a su marido, también tenga que perder a su familia e hijos, además de su ropa y carezca de cualquier tipo de protección social.
Afortunadamente, han nacido organizaciones que se encargan de ayudar a las viudas de estos países, aunque esto no significa que se les considere iguales a los hombres, que para nada es así. Son tratadas como inferiores y aunque existan leyes que “apoyan el feminismo”, no son llevadas a cabo, la sociedad las sigue considerando como una propiedad de los hombres. Para eso no hace falta crear leyes, hace falta concienciar a esas personas y hacerlas creer que debe haber igualdad, empezando por las mujeres, ya que algunas de ellas ni siquiera luchan por ser iguales, se les ha educado en una sociedad desigual y no imaginan un futuro diferente.
La manera de solucionar este gravísimo problema no es creando leyes que apoyen a la mujer, que también, sino educando y concienciando a estos países sobre la igualdad de género y cambiando sus antiguas y subdesarrolladas costumbres. Respecto a mi país, nuestra sociedad no ha avanzado lo suficiente y no puedo sentirme "privilegiado" cuando siendo un país "desarrollado", en lo que llevamos de año hay unas 30 mujeres muertas a manos de sus parejas, tenemos que seguir luchando por un mundo justo e igualitario.
Javier Botella Rodríguez 2ºB