Pero hay muchos más motivos que estos regalos, que han hecho el milagro de dar brillo a una mañana que se anunciaba tormentosa (ay las evaluaciones de bachillerato).
Hemos celebrado la clausura de curso con el grupo de colaboradores de Aequitas 25 y allí he sentido cuántas buenas razones hay para ser feliz. Trabajar con gente joven que te pega como un resfriado la locura y las ganas propias de su edad. Compartir momentos, buenos, malos y regulares; y sentir que no estás sola. Rebelarse ante la injusticia y utilizar las palabras y el debate para ello. Defender valores y, cuando una piensa que no, volver a defenderlos. Entender al que está al lado. Acercarse al que creíamos que estaba a mil leguas. Escribir. Escribir. Escribir. Leer. Leer. Dar besos. Apretar la mano amiga o darse abrazos. La genialidad del insigne. La bondad de Concha. La ternura inmensa de Marisa. La complicidad de Carmen. La lealtad de Inma. La cercanía de Juanma. Hipólito.
Adela, presente y futuro elegante y firme. Alberto, tecnológicamente solidario. Aly, libre y creativa. Blanca, la más pequeña; gigante y fuerte sin saberlo. Claudia y su tesoro secreto que un día nos mostrará. Cristina, pura dulzura y fortaleza. Eva, constancia y coherencia;qué hermosa. Fátima, que juegas a ser tímida pero no...cómo has crecido... Javi y tu voz, dos realidades independientes. Qué bueno que viniste. Judit, enorme. Cuánto me has enseñado. Julia, buena como Machado. Quiero tu mirar positivo siempre. Luna, como tu nombre: brillante, misteriosa y llena. Mady, tu sensibilidad te hace poderosa. Mira hacia arriba. María B., una fuerza de la naturaleza. María C. y tu ansia de saber mas. Marina, leal compañera, defensora de quienes mas lo necesitan. No te rindas nunca. Marta, el caos feliz. Óscar... Basta tu nombre. Pablo, discreto, directo, imprescindible. Paula M., con quien tanto he aprendido. Tu risa cura. Si te digo mas, lloro. Paula H, arrolladora y auténtica. Santi, el genio converso. Sergio, que ama mas. Ulises: me quito el cráneo, genio. Vicky y la iniciativa, la solidaridad, la energía. Has nacido para ser líder. Y otros muchos que han estado de alguna u otra manera: Elena,Miguel, Maleni, Paco, Iván, Camen Calzón...
Germán ( "la palabra precisa, la sonrisa perfecta") a veces dice cosas con sentido a pesar de ser un artista. Hemos querido, todos y todas los que hemos participado en este proyecto, que seáis Aequitas siempre. Donde estéis. Hagáis lo que hagáis. Que no os rindáis, ni os calléis, ni os conforméis. No abandonéis vuestros sueños. Y convertidlos, además, en los sueños de las personas que os rodeen. Y tampoco aceptéis realidades deshonestas, falsas, mezquinas. Que no os aplasten el ánimo las realidades obscenas, que son demasiadas; ni os roben los sueños, que son vuestros.
Y el motivo mas grande que tengo hoy para ser feliz es que vosotros y vosotras vais a cambiar el mundo. Lo sé porque ya lo estáis cambiando.
Con todo mi cariño, admiración y respeto, gracias.
Il était une fois une mère lionne qui enseignait à ses lionceaux avec une pacience infinie à se rebeller contre les injustices du monde...
ResponderEliminarQuién será? Pues nuestra leona particular, que no ha parado en ningún momento, ni en los más duros, de enseñar a tod@s sus cachorr@s que hay que usar todas las armas posibles para combatir las injusticias de este mundo. Enhorabuena leona, has conseguido un ejército de aequitenses que, de seguir así, superarán a su maestra!
Ojalá. Yo quiero aprender francésssssss!
ResponderEliminarAyyyy si eres la madre de todas las palabras bonitas!! Tu me has parido para Aequitas, tu me has enseñado a que sí puedo y tuya seré siempre.
ResponderEliminarNo hay besos, ni agradecimientos suficientes para ti y este grupo de observadores-escribas que nos ponen las pilas para continuar haciendo un mundo más humano.
Rendida a vuestros pies estoy!
Hard to add anything. Just to express.my full devotion to your passion for art, life and humankind. Let's go on dreaminggggg. Love to you all!
EliminarLa felicidad es ese ideal que todos queremos alcanzar. Todos imaginamos como sería nuestra vida si la tuviéramos. Seamos realistas, ¿quién no la quiere? Es como vivir en un mundo de yupi en el que nada nos importaría y no habría drama por tonterías como las cosas que ocurren en la serie de “Keeping up with the Kardashians”, que quien la hay visto alguna vez, sabe a lo que me refiero.
ResponderEliminarTodos sabemos que la desgracia es la llegada del mal, y también del dolor que sentimos los humanos, pero tenemos que conseguir destrozar esa barrera e intentar llevar nuestras vidas desde la infelicidad hasta la felicidad. La felicidad es la liberación del mal, es la búsqueda del hombre, y esto no lo podemos rechazar ya que se puede alcanzar.
La pregunta por la felicidad no requiere una respuesta concreta. Al descubrir la complejidad del problema, no podemos dejar de preguntarnos si no hay algún rasgo básico que queda en manos del azar, del destino, de la suerte, de la fortuna o, simplemente, de la aventura.
Este término cambia para cada persona. Hay gente que dice que su felicidad es irse de fiesta y emborracharse hasta quedar por los suelos todos los viernes, hay otra gente en cambio, como yo, que se conforma con un trozo de pizza o con un simple brownie de los que hace mi madre, que, por cierto, le salen deliciosos.
En conclusión, no vale la pena amargarse la vida intentado buscar la felicidad, solo tenemos que aportar nuestro granito de arena para que venga sola. Habrá momentos en los que sintamos más felicidad que en otros, y eso está bien. Arriesguémonos, porque en esta vida solo nos arrepentiremos de las oportunidades que no aprovechamos. Seamos quién queramos ser, no quien quiera el mundo que seamos. Vivamos la vida. Démosle a cada día la posibilidad de convertirse en el mejor día de la vida. Seamos tan felices que, cuando alguien nos mire, esa persona tenga ganas de ser feliz también.
“Nothing lasts forever, so live it up, laugh it off, avoid drama, take chances and never have regrets because everything you did was exactly what you wanted.”
CATHARINA RÖD CODEÇO 1ºBACH A
“Las personas hoy día no sabemos lo que tenemos” es una frase que se repite con frecuencia en nuestra sociedad. Es una verdad a medias, porque sí sabemos lo que tenemos siempre y cuando sea material, se pueda ver y tocar. Si no es así, parece una nimiedad que no debe ser destacada en nuestras vidas y es obviada. Por otra parte, es cierto que no somos conscientes de qué tenemos y siempre estamos deseando aquello que no necesitamos pero creemos necesitar.
ResponderEliminarEs por esto que sufrimos tanto y dudamos de tener una vida feliz. Los niños crecen viendo como sus padres se preocupan por “no tener” nada que ponerse para una salida, o como corren a comprar otro móvil cuando el suyo hace algo extraño o ha pasado de moda. Cuando vayan creciendo y adquiriendo una conciencia más adulta, irán repitiendo el ejemplo que han observado siempre; y así las generaciones que vengan.
Lo que quiero decir es que apenas nos damos cuenta de que todos los días tenemos, como mínimo, tres platos de comida, vehículos que nos acortan las distancias, servicios públicos que hacen más sencilla nuestra vida cotidiana y unos padres que nos ayudan en todo lo que pueden. Vivimos en un país donde no hay guerras, donde, aún habiendo problemas con la administración del dinero, se podría decir que se vive bien.
Entonces, ¿por qué creemos no ser felices?
Somos felices, pero no lo sabemos. Lo somos porque al oler café recién hecho, pasear y pasar buenos ratos con amigos o familiares, escuchar a los pájaros, ver el cielo azul… sonreímos y nos gustan las sensaciones que nos producen. Somos felices, pero se nos olvida la mayoría del tiempo.
María Barajola Marín, 2º Bach-B