18 de enero de 2015

¿Princesas?

Lo advierto: este vídeo es muy duro y si lo publico (soy la única responsable por si algún tutor legal se queja) es porque lo considero imprescindible.
Después de las navidades, se agrava el problema. Hay que quitarse los kilos de más y cuanto más rápido mejor. Nunca se sabe cómo una chica ( o un chico) empieza a caer en la espiral de la anorexia y la bulimia. Toda precaución es poca. Pero la raíz es siempre la misma: una sociedad castrante que empuja a producir seres iguales, perfectos (físicamente, claro) según los cánones establecidos por unos cuantos, el miedo a ser rechazado por no ajustarse a patrones falsos, este mundo falso y frívolo que solo se queda en la cáscara...
¿Cuándo empezaremos a sacarle la lengua a tanta porquería? ¿Cuándo nos enseñarán y aprenderemos a querernos como somos? ¿Cuándo dejaré de asustarme al ver que alguno de mis alumnos o alumnas adelgaza más allá de lo razonable?
Ya sabéis de qué va el vídeo. Si estáis hoy un poco sensibles, dejadlo para otro día.

23 comentarios:

  1. Pues sí, por desgracia la anorexia y la bulimia se han convertido en algo frecuente en la sociedad y… ¿Quién tiene la culpa?

    Cerca del 95 por ciento de las personas que sufren este trastorno son mujeres. Generalmente comienza en la adolescencia, a veces antes y ¿Cómo no? Empezamos con las muñecas, la Barbie… ¿Quién no ha soñado ser como ella?... En la televisión, en las revistas y en internet se refleja la imagen de cuerpos “perfectos” y métodos para adelgazar. Las mujeres deben de ser delgadas, muy delgadas, pero deben de tener unas tetas y un culo grandes, ahora bien, la cadera ancha que acompaña a estas cualidades está totalmente fuera de lugar… Y un hombre “perfecto” debe de ser delgado y de estar totalmente marcado, sino pierde todo el encanto.

    Esta sociedad es de chiste, un anuncio contra la anorexia y los trastornos alimenticios y seguido un desfiles de modelos (y da la casualidad que ninguna alcanza a tener la talla 36). Todos contribuimos al desarrollo de estas enfermedades, un claro ejemplo de esto es un mensaje que leí en el Twitter y que ponía justamente esto: “Scarlett Johansson está gorda”, frase acompañada de una imagen en la que la actriz aparece desnuda (robada de su última película). Yo no daba crédito. Al verla pensé: por fin una actriz natural con unas curvas preciosas y unos muslos que le rozan cuando andan y que ahora se empeñan en recortar.

    Yo, como adolescente, también siento la presión de los medios y de la sociedad por ser perfecta, por gustarle a los hombres y ser la envidia de las mujeres, pero hoy digo basta. Con esta actitud ponemos en riesgo la salud e incluso la vida de miles de personas. Debemos cambiar pero en la sociedad consumista en la que vivimos conviene que la gente gaste su dinero en dietas, gimnasios, productos “milagrosos” para adelgazar,… ¿Estamos dispuestos a seguir así? ¿Seguiremos arriesgando vidas? Tengo claro que la sociedad necesita tiempo para cambiar pero debemos empezar nosotros, demostremos a todas las personas del mundo que nadie es perfecto y que es imposible gustarle a todo el mundo. Reforcemos la autoestima de esas personas con problemas.

    Por último, la frase de un cantante que siempre me inspira hablando sobre estos temas: “Qué triste sería ser como quieren que seas”.

    Victoria Domínguez León 1ºB

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  2. Puedo empezar hablando de los medios que nos rodean y no hay ni uno sólo en el que no veas un ideal de belleza. ¿Podemos entonces hacerlos culpables? Empezamos una dieta pero ¿por sentirte bien o por agradar a los demás?
    Vale supongamos que te pones a dieta empiezas a adelgazar y ves como tu cuerpo cambia, te sientes bien, feliz el problema llega cuando tu cuerpo como es obvio te dice "hasta aquí hemos llegado" empiezas a hacer las típicas tonterías hoy no desayunas, por la noche un yogurt y a la cama y así, ves que tu cuerpo adelgaza mucho más rápido y comienzas a hacerlo más veces y la gente te comenta lo guapa que estas, lo bien que te queda esa falda negra y simplemente sonríes ME DA ASCO ASCO. He vivido casi en mi piel la anorexia en dos amigas diferentes. He visto como comían, lo que hacían para no engordar, por no hablar de pesarse a cada segundo. Necesitaban ayuda pero ella sólo escuchaban palabras bonitas de gente ajena, su comentario les servía mucho más que el mío o el de su familia. Ese es el problema, le damos más importancia a lo que piense la gente que no nos conoce de nada que la gente que nos quiere.
    Es difícil no sé cómo de difícil puede llegar a ser pero verlo desde otra perspectiva parece fácil, parecía fácil decirle a una de mis amigas que no todo está en entrarle por los ojos a alguien.
    Pero creo que nadie que no lo haya experimentado puede sentirse como ellos. Se me ponen los pelos de punta imaginarme a alguien diciéndose a si mismo gordo teniendo esa enfermedad.
    La mente es tan poderosa hasta tal punto de engañar a la vista.
    No quiero pensar en la gente que muere quiero pensar en la gente que hace huevos con su propia tortilla y se la come, sí, eso hicieron mis amigas comerse sus miedos. Doy gracias porque ellas quisieron cambiar el chip y también doy gracias a youtube por esos documentales tan magníficos que les obligaba a ver juntas, las tres.
    No se debe vivir por el mundo, el mundo debe vivir por ti.

    Lorena Garrido Lopez
    2Bachillerato D

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  3. Una y otra vez y otra y otra y otra. Constante el bombardeo de tallas 36, caderas marcadas y piernas separadas. Yo no sé si solo será mi impresión pero me parece que se ha convertido en una tarea bastante complicada el no dejarse influir por los cánones, que es necesaria una gran seguridad en uno mismo para que nos sintamos a gusto con nuestro cuerpo a pesar de todo.

    Como tendemos a hacer en casi todo no puedo evitar preguntarme quién tiene la culpa de todo esto. ¿Los medios de comunicación? ("Los medios de comunicación" parece un ente al que no se le pueden atribuir responsabilidades) Pues no lo sé. Por supuesto que todas las personas que forman este ente y que son los que deben filtrar lo que nos llega debería plantarse y buscar otra forma de tratar el cuerpo de su público,pero no creo que el problema nazca ahí. Más bien creo que estos se aprovechan con la frialdad de los negocios de nuestra debilidad. Una de las grandes debilidades del ser humano aquí y en Pekín: la falta de personalidad y espíritu crítico. Aprendemos por repetición y tenemos un miedo casi instintivo a ser rechazados por la manada. Por eso somos tan vulnerables a las modas y tan facilmente convencibles. Desde que estamos tan vinculados a las redes sociales han nacido nuevas formas de manipular nuestros gustos. Es suficiente con pagar a varios famosos o incluso famosillos para que suban una foto a "instagram" con un producto para que sus ventas se disparen. Todo esto es casi anecdótico hasta que somos tan tontos que caemos en modas que afectan a la salud: las cláviculas marcadas, las piernas "salchicha" en la piscina y el colmo de los colmos: el “thigh gap”. Lo siento pero me paro en esto último o si no exploto. A ver, el "thigh gap" es la moda de que los muslos no se toquen al cerrar las piernas. A pesar de que muchos no conozcan esta moda con este nombre, hemos aceptado esto (al menos yo reconozco que inconscientemente he caído en la trampa) como lo bonito. Precisamente Victoria escribe: "por fin una actriz natural con unas curvas preciosas y unos muslos que le rozan cuando andan" y cuando buscas en internet te salen preciosos artículos con títulos tan profundos como "26 pasos para tener un espacio entre los muslos" Así de duro. Como tontos seguimos las modas y algunos que otros que no tienen la autoestima de acero caen en obsesión por tener un "agujero" entre las piernas. ¿Lo peor? Que como muchas otras cosas es una característica casi únicamente genética e imposible de conseguir para la mayoría de la gente. Y ahí nacen otros cuantos casos de trastornos alimenticios.

    No me quiero extender mucho más pero creo que este es un buen sitio para escribir algo que me molesta hace tiempo. Muchas de las personas que escriben acerca de este tema caen en el error de hablar con desprecio de una talla 34, usan términos como " huesudas" o más de una vez he leído "esqueletos andantes" y muchas veces piden desesperadamente que las marcas no fabriquen pantalones de una 32. Claramente esta talla no puede inundar nuestras tiendas pero se nos olvida que hay personas menudas y totalmente sanas. SANAS, esa es la cuestión. La cuestión (nada fácil) es estar SANAS Y QUERERNOS.

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  4. La sociedad. ¿Qué podría decir yo acerca de esto? Siempre he pensado, desde pequeñito, que la sociedad es un mojón enorme. No es que odie a la gente, ni la civilización, ni ninguna de esas cosas; es la sociedad en sí la que odio. Una única forma de vestir, de hablar, de andar, de mirar, de respirar, de pensar, de vivir, de existir. Nuestra sociedad no es más que una limitación para todo lo que existe en la vida. Hasta tal punto tenemos tan apretada esta soga al cuello, que ni siquiera podemos ser nosotros mismos.

    En esta sociedad de mierda, el inteligente es un ''pringado'' y el imbécil es un ''guay''. Yo me sorprendo aún, después de tantos años, cuando veo este tipo de razonamiento que, de alguna manera, parece bastante lógico para algunas personas. En esta sociedad de mierda, la ''gorda'' (entre comillas porque llaman gorda a toda chica que no cumpla los requisitos mínimos para ser considerada delgada, y no por ello debe estar realmente gorda) es fea y la ''delgada'' es guapa. Yo me deprimo aún, después de tantos años, cuando pienso que la gente sufre por esto.

    La sociedad es un libro, una guía, escrita por un tonto y/o una tonta tiempo atrás. Una guía de la vida. Cada cierto tiempo, sacan una nueva edición actualizada en la que se incluyen las nuevas modas, nuevos conceptos de belleza, y el resto de mierdas. Esta guía siempre ha estado escrita, y ha regido la vida de todos y de todas como una dictadora. Para que una persona se pueda integrar en el mundo, debe comprarse y seguir esta guía. Y por ello, algunas personas llegan a extremos como la anorexia y la bulimia.

    Conozco gente que sufre o ha sufrido alguna de estas enfermedades. Mi horror no podía ser más grande cuando estas personas, entre sollozos y lágrimas, me contaban sus experiencias. Me quedaba helado, sin saber qué decir, no solo por el gran pesar y sufrimiento con el que han tenido que cargar, sino porque de ninguna manera yo habría sospechado que estas personas eran así. Eso me hizo darme cuenta de que, sin que lo sepamos, a nuestro alrededor, hay muchas más personas de las que creemos que sufren por esto. Compañeros, compañeras, amigos, amigas, hermanos, hermanas... Sin darte cuenta, todo este tiempo, esa persona que tanto querías y a la que tanto aprecio le tenías, ha estado sumido en la absoluta desesperación por la sociedad de los coj*nes. Pensarlo, me destruye por dentro.

    ¿Y qué podemos hacer nosotros? Pues, solo podemos ayudar personalmente a esas personas, pero nunca podremos detener esta espiral de estupidez que lleva a la muerte a tantas personas anualmente. La ''Guía de la Vida'' seguirá actualizándose, y cada edición nueva será incluso más absurda que la anterior, con nuevas modas estúpidas y con conceptos de belleza ridículos. Seguirá cambiando por siempre, pero jamás desaparecera ese yugo que tiene sobre todas las personas que pueblan nuestro planeta.
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    (esto no forma parte del comentario crítico)

    Y ahora, a todo chico o chica que esté acomplejado por cómo es y que esté leyendo este mensaje, les digo una cosa: si alguien se mete con vosotros por vuestro aspecto, dedicadle vuestra mejor sonrisa sarcástica, levantad vuestro dedo pulgar, y decidle: ''OK'' :)

    Que no os importe jamás lo que opinen de vosotros, solo importa lo que opines tú; no hace falta que cambies para nadie.

    -Javier Sevidanes 1ºB Bachillerato

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  5. No sé cuándo el llamar delgado a alguien empezó a ser un piropo, algo bueno, algo de lo que sentirse orgulloso. ¿Quién ha decidido que sea más atractivo estar delgada que estar gorda? Es más, ¿por qué “gorda” se considera un insulto?
    Todo esto es culpa nuestra que, ciegos a la verdadera realidad por culpa de lo que vemos día a día, hacemos lo que sea por llegar a ser como la sociedad quiere que seamos a pesar de que incluso, como en este caso, vaya en contra de la salud. Hacemos lo que sea por seguir modas, por no salirnos de ese “molde” de mujer ideal y atractiva que nos persigue a donde quiera que vayamos. Tan solo hemos de fijarnos en las mujeres que salen en los anuncios, en la mayoría de las presentadoras de televisión, cantantes, actrices…
    Todo esto nos hace pensar: ¿Nuestro valor se mide por nuestra talla, por nuestro aspecto? Siempre nos han dicho que hay que dar una “buena impresión” antes de una entrevista de trabajo o un casting. Tiene lógica, teniendo en cuenta que será lo primero que vean de nosotros y el aspecto normalmente refleja parte de la personalidad de un individuo, pero hoy en día, en muchas ocasiones, observamos que desgraciadamente tiene incluso más importancia el ancho de tu cintura que tus cualidades para hacer algunos trabajos. La mismísima Adele tuvo problemas en más de un casting debido a su físico y nadie puede decir que no tenga dotes magníficas de canto. Una persona no va a trabajar más o mejor sólo porque tenga un cuerpo que, según los cánones de moda actuales, sea bonito.
    Una de las peores consecuencias de la presión de los medios y de nuestra actitud es la repercusión que tienen en los niños. Niños de primaria, niños de 8 o 9 años que sufren acoso por parte de sus compañeros por su físico, generalmente por sus kilos. Con esa edad deberían estar jugando, divirtiéndose, no preocupados por su peso o por lo que piensen los demás de ellos. Tan sólo imaginaos cómo se siente una niña un poco rellenita de esa edad si le llaman gorda, tan sólo intentad tener un poco de empatía por un momento y poneos en su lugar. ¿En qué cabeza cabe que un crío se tenga que avergonzar de su cuerpo?
    Vivimos en una sociedad cada vez más tiránica, que cada época cambia sus cánones de belleza para hacerlos más inaccesibles a la mayor parte de la gente. Y nosotr@s, como verdader@s estúpid@s, siguiéndolos.

    Julia González Pérez, 1ºB Bachillerato

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  6. Marilyn Monroe actualmente pasaría de ser considerada sex symbol a “gorda”. Según algunos, tenía demasiadas curvas. Y Jennifer Lawrence fue considerada en un principio “demasiado gorda” como para poder triunfar en el mundo del cine. Y todo porque ahora lo que está de moda es enseñar los huesos.

    La anorexia no es algo nuevo, pero si la naturalidad con la que a mi parecer se trata hoy día. Es un problema serio, difícil y bastante duro, y a pesar de ello hay chicas que juegan a saltarse comidas y probar qué pasa si no comen nada durante toda la mañana y el día, si es posible. Y el problema empieza ahí, y ahí es donde hay que cortarlo de raíz. Porque a lo mejor se da cuenta de que sobrevive, y que pasadas dos semanas le llueven piropos, como si fuera bueno ver a una chica adelgazar extrañamente sin necesidad. Y lo peor de todo es que algunas lo hacen sin siquiera tener un defecto de este tipo que en cierto modo las “excuse”. Porque esté una como esté, por supuesto, siempre está en todo su derecho de querer adelgazar, pero todo llevado de manera sana, algo que no se hace por su lentitud o esfuerzo, supongo. Pero ya más que la sociedad, los medios, el cine y demás, es el ambiente día a día. He visto chicas negar rotundamente querer realmente un cuerpo de ese tipo, tan irreal, tan doloroso; pero resulta que alrededor todas sus amigas tienen como estilo de vida tener la boca sellada, y si ella decide abrir un paquete de galletas, enseguida estas la miran aterrorizadas. Y el problema no es ver a tantas chicas perfectas, sino recurrir a este procedimiento en el momento en que no nos vemos como quisiéramos.

    Depende de la fortaleza de cada uno, para algunas personas esto es llevadero. O quizá decida ignorarlo, pero no todo el mundo es igual de fuerte, ni capaz de desvanecer con la misma rapidez unas palabras de su cabeza, y por eso uno no puede hablar en nombre de todos. No voy a decir que este tipo de chicas me dan asco, como he oído a algunas personas, ni que ver y pensar ese tipo de cosas son idioteces, ni tampoco que no haya que dejarse llevar por lo que nos bombardean los medios de comunicación. Porque todo eso es muy fácil de decir. Es fácil de decir a una chica que se vea gorda que se quiera tal y como es, cuando después se sale a la calle y lo que se utiliza para criticar a esa otra que tan mal cae es que es una “foca”.

    He visto muy de cerca varias situaciones de este tipo, y algunas han llegado a límites bastante peligrosos. Y sé que no es fácil verse día a día insatisfecha consigo misma, y que sin darse cuenta, la necesidad de evitar las comidas se convierten en tal asfixia que ingerir el mínimo alimento puede torturar durante días. Normalmente cuando se dan cuenta, es demasiado tarde y de nada sirve ejercer de amig@ controlador/a o criticar su actitud, pero podemos prestarles un poco de toda esa fuerza que nos sobra para empujarles a abandonar esos falsos ideales y ante todo ser honestos a lo que defendemos.

    Paula Macías Pardo, 1º Bachillerato B.

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  7. ¿Quién no ha pensado alguna vez que su físico podría mejorar? Quien diga que no lo ha hecho miente. La sociedad nos arrastra a ese pensamiento, nos presiona con un único objetivo comercial. ¿No nos damos cuenta? Que gastemos dinero en milagros dietéticos, en gimnasios, en productos de belleza… Única y exclusivamente les beneficia a ellos. Sólo a ellos. Ni las dietas milagros, ni los gimnasios, ni una crema carísima nos van a servir para nada. Al revés, van a aumentar nuestro ansia de más, de seguir gastando dinero en esas cosas. Y ya no eso, van a perjudicar a nuestro subconsciente, que como dice el vídeo se volverá más débil ante cualquier bombardeo publicitario y que propicie cualquier enfermedad mental.
    Cuando se busca angustiosamente una felicidad arraigada al hecho de ser más bello o bella, normalmente se pasa de largo el hecho de que eso no es felicidad. Las bulímicas no son más felices por vomitar todo lo que comen, pero seguramente empezaron a hacerlo un día creyendo que llegarían a serlo. Las anoréxicas nunca se conforman, siempre quieren estar más y más delgadas… ¿Eso es felicidad? Eso es estar enfermo.
    De donde provienen todas las causas para que estos absurdos fenómenos ocurran no es muy difícil de imaginar. Yo no me beneficio de que mi vecina llore todas las noches mirándose al espejo, ni de que mi madre se gaste un promedio de cien euros en dietas todos los meses (que afortunadamente no es el caso)… Es más que lógico quién se beneficia y no hace falta que yo lo reitere porque ya lo han mencionado mis compañeros. Que alguien saque partido de que las personas estén enfermas es muy fuerte, ¿no? Pero la sociedad asquerosamente echa un tupido velo por encima y mira hacia otra parte. Los anuncios seguirán, en las pasarelas no habrá ninguna mujer con sobre peso, y seguiremos comprando alimentos bajos en grasa aunque ni siquiera los necesitemos.
    Pero lo más estúpido es que esto pasa en los países desarrollados. Esos países con gente inteligentísima, eruditísima, que son magníficos políticos y hacen descubrimientos alucinantes y viajes a la Luna… En otros países ni siquiera tienen para comer y nosotros incitamos a tirar comida. ¿Qué somos? ¿En que nos hemos convertido? ¿A qué serán las grandes multinacionales capaces de llegar para conseguir más millones? ¿Algún día esto parará? ¿Hemos empezado algo que ya no tiene fin?

    María Gómez Risquet 2º Bach, A

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  8. Miro el plato. Con miedo. Con asco.
    Mis ojos vagan hacia mi madre. Ella me mira con miedo a mí, como si tuviera una granada a su lado. Veo en sus ojos muchas cosas: reproche, pérdida, decepción.
    -Con lo inteligente que tú eres...- musita.
    Sí, lo sé, sigo siendo un fracaso. No puedo comer sin sentir culpa, ni dejar de hacerlo sin estar atosigada por el mismo sentimiento.
    También sé que debería haber aprendido la lección. He visto muchas cosas, y ojalá pudiera olvidarlas. Ojalá las pesadillas dejasen de perseguirme.
    Me muero por tomarme una coca-cola. Pero no, son calorías vacías, amarillean mis dientes, y me quita mi ya inexistente apetito. Y sin embargo ahí está, fresca, la condensación creando un hermoso efecto sobre el carmesí de la lata.
    Lata que ahora está vacía. ¡Tiene que salir! ¿qué he hecho?
    Soy un fracaso.
    No voy a firmar. Yo también perdí a alguien, y llevo dos años tratando de superar su pérdida, y la pérdida de mí misma cada vez que me descalzo para subir a la báscula.
    Pero no quiero que nadie sepa mi nombre, mi humillación. Tan solo que esto no es una broma, no es un juego. No es fácil, ni tampoco útil. Para mí, es tan solo el recuerdo de las personas que intentaban herirme gritándome "¡gorda!" por los pasillos del instituto, o en la piscina con mis primos, o en cualquier parte, en realidad.
    Con lo inteligente que sí, ¿cómo he podido equivocarme tanto?

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  9. A todos nosotros nos gusta hablar de la increíble, magnifica, esplendida sociedad que todos conoceos. Todos nos llenamos la boca de palabras y frases con las que creemos argumentar cosas con sentido a favor o en contra de dicha sociedad. Todos, alguna vez, hemos despreciado a la sociedad y lo que esta conlleva. Pero no nos acordamos de que TODOS somos componentes de la sociedad en la que vivimos.
    Alto, bajo, gordo, flaco, guapo, feo,… Palabras, nada más. Pero como todos sabemos el arma más poderosa que existe es eso precisamente, palabras. Esas hacen daño, tanto daño que consiguen que una persona deje de comer, creo que la gente no es del todo consciente de lo que acabo de decir. Repito. Que una persona deje de comer, de nutrirse, de hacer algo que es básico, lo más elemental de un ser humano y de cualquier ser vivo, comer.
    Hace siglos se inventaron los cánones de belleza que son una serie de características para las proporciones corporales, rasgos faciales, etc… con esto se podía calificar la “belleza” de una persona. Estas costumbres perduran hoy día de otra forma muy distinta, ahora no se rige por los cánones si no por las modas. Las modas vienen y van dejando a su paso multitud de estupideces que la mayoría de la gente repite o acata de forma ciega y estúpida. Estas modas son “controladas” por nuestra querida sociedad, la misma que se molesta en criticar a religiones como la musulmana por decir en su libro sagrado que las mujeres deben taparse el pelo e ir recatadas (cosa que no es del todo cierta ni verídica), pero no se dan cuenta de que la gran mayoría de esas mujeres lo hacen por que quieren y no son obligadas, mientras que adolescentes mueren debido a una mala alimentación por que quieren estar “mas delgados”, y todos lo hacen por voluntad propia al principio. Esto es solo un ejemplo, no quiero dar lugar a malentendido.
    ¿Qué es la belleza? Una palabra, una muy peligrosa y horripilante, puede llegar a deformar nuestra visión de otras personas y hacernos sentir mal con nosotros mismos por algo como el aspecto. Incluso yo me fijo en el aspecto de una persona, eso es debido a la visión que nos inculca prematuramente esta sociedad. El sobrepeso lo entendemos como algo malo, pero por que en esta sociedad se ha acogido como algo malo por el aspecto físico en vez de las verdaderas preocupaciones que debe tener uno como que el sobrepeso te lleva a tener problemas musculares y óseos, aumenta tu colesterol y puede provocar paradas cardíacas. Esas son razones para no querer tener sobrepeso.
    Y por fin volvemos con la atracción principal, la sociedad, esa gran basura que únicamente sabe autodestruirse, se ataca a si misma una y otra vez y con el paso del tiempo busca formas distintas para hacerlo. Todos estamos impregnados de ella. Todos somos parte de esa basura, y es algo que jamás se podrá cambiar, ya que mientras exista una persona en el mundo, la seguirá viva. En un proceso constante de autodestrucción.

    Samir Sefiani Castelar 1ºBachillerato B

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  10. Cadenas, esposas...
    Son el elemento más importante de este vídeo. El gran número de adolescentes (y no adolescentes) tanto mujeres como varones son esclavos de estos grilletes irrompibles e imaginarios cuya sociedad enfermiza cierra con llave y la destruye. Nuestras mentes son llenadas de basura kilométrica; propaganda innecesaria que se nutre del amor propio de miles de personas que ansían a toda costa tener un cuerpo de anuncio que quepa en una talla 32.
    Curioso como la talla de un pantalón es irrelevante dependiendo de la tienda en la que la compras. ''¿Necesitas ropa nueva? Deja de comer durante un mes o dos y quedarás perfecta/o'' es prácticamente lo que las imágenes publicitarias de la amarga industria de la moda nos querría decir si en lugar de un modelo pusiéramos una simple frase.
    Chicas que se suicidan lentamente por caber en unos vaqueros, chicos que necesitan ver un adonis en ese espejo cada mañana para comenzar su día.
    Es una masacre lenta y dolorosa. Las mentes de jóvenes inflamadas de visiones falsas, impregnadas del ácido que envuelven sus gargantas al provocarse el vómito.
    Miles, incluso millones de páginas en internet son encontradas en el navegador relacionadas con trastornos alimenticios cargadas de preadolescentes llenos de dudas, miedo y desesperación por no saber por qué sus físicos son tan diferentes a los de la tele.
    Somos una sociedad que busca la perfección hasta el punto de querer morir para conseguirlo, son muchos los que están pasando por momentos de penumbra del cual es necesario salir con vida.

    Jose Saiz Camacho, 2º Bachillerato D.

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  11. El deseo de alcanzar la delgadez extrema es un problema que está aumentando debido a los cánones de belleza que implantan los medios de comunicación, donde aparecen cuerpos perfectos sin ser muchos de ellos reales. Los trastornos alimenticios afectan mayoritariamente a mujeres, principalmente a adolescentes que suelen tener una baja autoestima. Estas enfermedades pueden llegar a ser crónicas o no ser superadas.
    Pienso que la anorexia y la bulimia son formas de expresar la presión que se siente por gustar a los demás, porque las vean bien y por sentirse bien ellas mismas, para ver la persona que realmente quieren ver pero sin tener ningún límite. Llegando a verse personas que no son, despreciándose pensando que no valen nada y entrando en una espiral de la que no pueden salir obsesionándose con lo que comen, con lo que hacen y con lo que piensen los demás. Hasta extremos donde se ponen la imagen y la apariencia por encima de todo lo demás, incluyendo la salud y su propia vida, viendo adelgazar como algo necesario e imprescindible.
    Los medios de comunicación tienen una gran parte de culpa ya que nos muestran como ser, como vestir y además como conseguirlo: dietas, operaciones y productos que no son precisamente baratos. Nos convencen de que la belleza es de lo más importante y que con ella seremos más felices e incluso la asocian con el éxito. Creo que deberían decirnos menos como debemos ser y centrarse más en lo que consiguen con ello, que no es que seamos altos ni delgados, sino muertes de personas por una sociedad demasiado superficial.

    Lucía Marina Zamorano, 1ºBachillerato B

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  12. Vivimos en una sociedad donde la imagen es lo mas importante, no es sentirse guapa uno mismo si no que los demás lo piensen. Quienes mayoritariamente sufren esto son las adolescentes por dos razones, la primera es por lo que vemos, estamos hartos de observar en la tele modelos y personas que por estar delgadas todo el mundo está a sus pies y tienen todo lo que quieren. También porque vemos personas que son más delgadas que nosotras y queremos estar como ellas. La segunda razón es porque cuando queremos estar delgadas nuestros padres no nos dejan hacer dietas o hacer deporte todos los días por que tenemos que hacer obligaciones y a veces no nos da tiempo, o simplemente no lo hacemos porque nos cuesta mucho. Ante esto lo que solemos hacer es lo mas rápido y eficaz dejar de comer por un tiempo y cuando esté bien paro o vomito después de cada comida durante un tiempo. Pero no es así una vez que se empieza nunca para va a mas y mas porque nunca se sienten bien consigo mismas. La gente les riñe pero no les importa su objetivo es estar mas y mas delgada. Nunca le gusta su imagen. Mayoritariamente las que sufren uno de los dos trastornos mentales caen también en otros. No les importa nada ni que la piel se las vuelva amarilla, fria y aspera o que se les caiga el pelo, solo persiguen su objetivo. Cuando llegan a un mayor grado no pueden parar todo lo que hacen les cuesta se vuelven débiles y vulnerable a millones de enfermedades y virus porque no tienen alimento . Van a médicos y psicólogos les ponen dietas y tratamientos pero se niegan. Se ven obligadas a coger unos kilos de más y junto a esto viene la depresión y las ganas de dejar de vivir. Esta enfermedad debería ser muy controlada ya que es una enfermedad que es como un virus si alguien de tu alrededor la padece te puedes a llegar a contagiar. Es una enfermedad que el 6% de las afectadas muere y un 30% no llega a curarse nunca del todo, lo cual indica la gravedad de esta enfermedad. Hay que saber aceptarse tal y como eres y verte guapa tu misma y no fijarse en los demas porque todas las personas somos diferentes y tenemos constituciones diferentes y no por estar más delgada vas a estar mejor, porque hay cuerpos que son más bonitos con unos kilos de más que con kilos de menos.

    Mariola Gómez León 1 bachillerato B

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  13. Vivimos en una sociedad donde la imagen es lo mas importante, no es sentirse guapa uno mismo si no que los demás lo piensen. Quienes mayoritariamente sufren esto son las adolescentes por dos razones, la primera es por lo que vemos, estamos hartos de observar en la tele modelos y personas que por estar delgadas todo el mundo está a sus pies y tienen todo lo que quieren. También porque vemos personas que son más delgadas que nosotras y queremos estar como ellas. La segunda razón es porque cuando queremos estar delgadas nuestros padres no nos dejan hacer dietas o hacer deporte todos los días por que tenemos que hacer obligaciones y a veces no nos da tiempo, o simplemente no lo hacemos porque nos cuesta mucho. Ante esto lo que solemos hacer es lo mas rápido y eficaz dejar de comer por un tiempo y cuando esté bien paro o vomito después de cada comida durante un tiempo. Pero no es así una vez que se empieza nunca para va a mas y mas porque nunca se sienten bien consigo mismas. La gente les riñe pero no les importa su objetivo es estar mas y mas delgada. Nunca le gusta su imagen. Mayoritariamente las que sufren uno de los dos trastornos mentales caen también en otros. No les importa nada ni que la piel se las vuelva amarilla, fria y aspera o que se les caiga el pelo, solo persiguen su objetivo. Cuando llegan a un mayor grado no pueden parar todo lo que hacen les cuesta se vuelven débiles y vulnerable a millones de enfermedades y virus porque no tienen alimento . Van a médicos y psicólogos les ponen dietas y tratamientos pero se niegan. Se ven obligadas a coger unos kilos de más y junto a esto viene la depresión y las ganas de dejar de vivir. Esta enfermedad debería ser muy controlada ya que es una enfermedad que es como un virus si alguien de tu alrededor la padece te puedes a llegar a contagiar. Es una enfermedad que el 6% de las afectadas muere y un 30% no llega a curarse nunca del todo, lo cual indica la gravedad de esta enfermedad. Hay que saber aceptarse tal y como eres y verte guapa tu misma y no fijarse en los demas porque todas las personas somos diferentes y tenemos constituciones diferentes y no por estar más delgada vas a estar mejor, porque hay cuerpos que son más bonitos con unos kilos de más que con kilos de menos.

    Mariola Gómez León 1 bachillerato B

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  14. ¿Por qué no podemos aceptar nuestro cuerpo? ¿Acaso es tan horrible como para cambiarlo? ¿Acaso es tan importante la apariencia? Muchas veces, aunque parezca increíble, preferimos ser bellos por fuera antes que ser bellos por dentro. Las personas anoréxicas, no solo es que se preocupen por su cuerpo, o que lo quieran tener perfecto, sino que en la mayoría de los casos, es tanta la preocupación, que deciden dedicar noche y día exclusivamente a su apariencia. A raíz de esto, empiezan a tener complejo, a no salir a la calle, a cambiar sus actitudes, a sentirse rechazado, en definitiva, a perder a sus amistades y quedarse aislados en la sociedad. Mucha culpa la tiene los prototipos ideales de belleza. Los cánones de la belleza son la referencia o la meta de los aneróxicos. Sobre todo, su rigidez a la hora de tener unas medidas perfectas, donde no existe otra opción aparte de la perfección. En mi opinión, pienso que deberíamos cuidar nuestra imagen, pero siempre de una manera controlada. Bajo mi punto de vista, es más importante olvidarte de tu exterior y centrarte en pasártelo bien, en conocer gente, en pasar tiempo con gente a la que le importes, etc, porque al final, te das cuenta de que la apariencia no es más que un complemento a tu persona, y que la gente realmente se va a interesar más por cómo eres antes que por tu físico.

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  15. Todos somos diferentes fisicamente, unos altos, otros bajos, unos rubios, otros castaños, unos más delgados que otros...pero seas como seas uno se tiene que querer así mismo, y tiene que aceptarse tal y como es. Yo soy adolescente y creo que a mí como a todos los adolescente nos importa mucho las apariencias, supongo que le damos muchas importancia a esto. Hay personas que no tienen relaciones con otras por el siempre hecho de estar más gordos o delgados...pero ¿Por qué? Se supone que te tiene que gustar su forma de ser y no su físico ¿Por que tu salgas con una persona mas delgada o gorda vas a ser mas feliz? No, y desgraciadamente por estas cosas y por comentarios de las personas hacia tu físico, hay casos de anorexia y bulimia, nos tenemos que aceptar también unos a los otros, aunque también realmente este problema tienen culpa los anuncios, publicidades...siempre ponen en ellos una mujer u hombre guapo/a, alto/a, musculosos y en caso de las mujeres delgadas y eso da a entender que si consigues ser como ellos eres perfecto físicamente; las perdonas creen que si consiguen esas cosas y hacer lo que quieren los demás van a ser perfectos o más felices, pero se mienten a ellos mismos.
    Rosario Vázquez Martín 4D

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  16. Que si tengo barriga, que si me ha salido un granito en la cara, que debo de ir al gimnasio por que tengo los glúteos caídos... Esto es lo que las mujeres actualmente llaman problemas.

    La sociedad nos pone una imagen de cómo debe ser el cuerpo perfecto, la cara perfecta, un pelo precioso. No piensan que chicas por tal de conseguir ese físico son capaces de todo, hasta de morir.
    Es ésta la que nos hace sentirnos a veces mal si no seguimos las "normas" que dicta. No nos importa caer en enfermedad sólo por el simple hecho de vernos bellas, aunque una persona con ausencia de salud no creo que sea muy bella. Un ejemplo es la anorexia, creen verse gordas, cuando en realidad están esqueléticas.

    Cuando eres pequeño, y eres el obeso de la clase, es más difícil de sobrellevar, ya que la mente todavía no está tan desarrollada ni es tan fuerte como cuando eres más mayor. La gente en vez de ayudarte, te critica , te margina. Es un ejemplo de la penosa sociedad en la que vivimos, no quiero generalizar, pero desgraciadamente la mayoría es así.

    Cada uno somos lo que somos, somos lo que nuestra genética o factores externos han realizado en nosotros. No podemos deprimirnos porque a una persona no le gustemos, pues habrá otras cientas a las que sí. Tenemos que guiarnos por lo que nosotros pensamos de nosotros mismos, si queremos vernos mejor físicamente que sea porque así lo hemos decidido y no porque nos veamos presionados por un grupo de personas. Sobretodo, miremos por nuestra salud que es la que vamos a tener en toda nuestra vida y eso si hay que cuidarlo. Yo me siento bien conmigo misma, ¿y tú?.

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  17. La anorexia y la bulimia son los dos trastornos psiquiátricos más comunes en la actualidad. Esto es debido a los medios de comunicación, a la gente que te rodea y a la sociedad en general. Vivimos en un mundo donde el ideal de belleza es una persona alta, delgada, sin curvas y por supuesto, con la piel bien estirada y suave como un muñeco.
    A menudo vemos en la televisión anuncios de perfumes, maquillaje, cremas, desodorantes, coches, y podría seguir diciendo anuncios de todo tipos, en los que suelen salir mujeres y hombres ''perfectos'' sin ni siquiera un grano, todas estas mujeres la mayoría operadas por supuesto. Este es el problema, en los medios de comunicación sale una realidad totalmente diferente, y después ¿qué ocurre? Pues ocurre que hay personas que no saben diferenciar ''la realidad'' de los medios a la verdadera realidad. La mayoría de estas personas son adolescentes, y sobretodo de sexo femenino.
    En la adolescencia es cuando se suele tener mas inseguridad, suele ser la época en la que se presume y se intenta gustar a los demás antes que a uno mismo y esto causa infelicidad.
    La gente que te rodea a veces también perjudica muchísimo, porque cuando una niña ha disminuido su peso lo primero que le dicen es ''que guapa estás, se te ve más delgada'' y eso anima a niñas con problemas de anorexia a seguir disminuyendo su peso para que la gente la vea guapa y así, mejora su felicidad. Lo que no saben es que poco a poco esa felicidad irá bajando y que el cuerpo es algo muy sensible que cuando no aguanta mas, se rinde.
    Es muy difícil superar un trastorno así, pero no imposible, esas personas deben pensar que nadie es perfecto, cada uno tenemos un cuerpo diferente y no solo existe la belleza física, sino que también hay que mirar hacia el interior. No somos muñecos, no necesitamos operarnos, aumentar el nivel de pechos, ni tener una talla 34 para gustar a los demás y ser felices.

    Ana Rodríguez León. 2º Bach. D

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  18. La sociedad en la que vivimos es demigrante, todos los mensajes de televisión, prensa, internet sobre el cuerpo perfecto hablan de adelgazar, ir al gimnasio, fármacos para la belleza, cuidados del pelo, etc. Existe una gran diferencia entre estar sano y tener el cuerpo perfecto, y ese pequeño escalón entre una cosa y la otra sólo la perciben unas cuantas personas. Esta bien cuidarse, arreglarse etc, pero no obsesionarse con ello. Las consecuencias de esto son enfermedades muy serias como la bulimia o la anorexia, las cuales las sufren aquellas personas que tienen muy poca fuerza mental. Estas situaciones afectan tanto a hombres como a mujeres, aunque mayoritariamente a estas últimas. Desde mi punto de vista el mundo de hoy día esta demasiado condicionado por el exterior, todo lo que dicen los medios de comunicación es verdad, y no es así.
    Cada uno es como es y lo principal es quererse a si mismo,¿si no quien te va a querer?
    No hace falta ser delgada, alta, con la cara suave y el pelo precioso para gustarle a alguien, solo con ser uno mismo y tratar a los demás como te gustarían que te tratasen ati.
    Como consejo que doy a las chicas que padecen estas enfermedades o se obsesionan por estar perfectas, sólo decirles que anunque es difícil salir de esas situaciones, con esfuerzo y consistencia todo se puede. Y ya se sabe que "a palabras necias oídos sordos"

    ADRIÁN GARRIDO CALDERÓN 1º BACH B

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  19. Me sorprende saber que un gran número de adolescentes se preocupan por su cuerpo y gracias a eso, padecen enfermedades tan graves y duras como la anorexia o la bulimia.
    Como ya sabemos, esta sociedad está muy preocupada por su aspecto físico y todo va a ir a más principalmente por medios de comunicación en los que una mujer o un hombre muy delgado se consideran perfectos, agencias de modelos, que por la estupidez de llevar una talla pequeña para desfilar, provocan miedos e inseguridades.
    Pero el problema no sólo esta ahí, sino que encontramos esto en personas que se ven influenciadas por otras al saber que si pierdes peso estás más guapo/a.
    Este problema, creo que es difícil que se solucione, puede mejorarse pero no acabar, ya que, los que provocan esta dificultad, buscan su propio beneficio y no creo que les importe mucho la salud de las personas.
    Rafael González Alba 2ºA

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  20. Los medios de comunicación pretenden mostrar una imagen perfecta del ser humano, lo cual es imposible. Esto lo que hace es obsesionar a la población de que debemos ser perfectos. Los anuncios de cremas, perfumes, medicinas para adelgazar, todo esto conlleva a que muchos adolescentes padezcan anorexia.
    Vivimos en un mundo en el cual se le da más importancia a lo superficial que a la persona en sí. La anorexia es un claro ejemplo del descontento que padecen muchas personas por su físico, y parte de ello lo tiene la sociedad actual. Se han perdido los valores humanos, lo superficial no tiene ninguna importancia, la persona en sí reside en el interior de uno mismo y es lo que te da tu personalidad. Me indigno al ver la cantidad de adolescentes que han muerto con un peso inferior a los cuarenta kilos y que se veían gordas y feas. Estos valores que toman los jóvenes de verse obligados a ser perfectos son por culpa de todo lo que ven en televisiones, radios o simplemente por la calle mediante anuncios. Debemos cambiar la sociedad ya que se está convirtiendo en aquello por lo que no se debe fijar: el físico. Ya no salimos con las personas por su forma de pensar si no que salimos con ellas por su aspecto, debiendo ser al revés.
    No quiero vivir en un mundo superficial, porque se convertirá en un mundo vacío que hará que no le veamos sentido al amor entre otras cosas. Las personas que padezcan anorexia deben parar y pensar en las personas que tienen a su alrededor que les quieren por como son interiormente no por su físico.

    José María Alfaro 1ºB

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  21. Vivo en una sociedad en la que tengo que tener un físico concreto y perfecto, deben gustarme ciertos estilos musicales y debo llevar el estilo de vida establecido, en el que, como adolescente que soy, deberé emborracharme todos los fines de semana, y acudir a los puntos concretos de reunión de todas las personas de mi generación.

    Es algo irónico y absurdo, pero aún así, es totalmente cierto. Lo peor de toda esta inmensidad de sandeces y estupideces es que, si no cumples estos requisitos que “debes” tener al ser un adolescente, si sales de los límites establecidos más de la cuenta, sea en el aspecto que sea, serás tachado, humillado y muy probablemente objeto de burlas, juegos y risas.

    Desde hace millones de años, el mundo se ha centrado única y exclusivamente en el aspecto físico de la mujer, ya que, por ejemplo en la prehistoria, los machos luchaban por conseguir a la mejor “hembra” (obviamente en el aspecto físico), y finalmente ganaba el que poseyese una mayor fuerza y habilidad, sin importar lo más mínimo otras habilidades como la bondad e inteligencia. Hemos evolucionado, pasando por diferentes épocas, y los modelos establecidos han ido cambiando abismalmente hasta el punto extremo en el que hoy día nos encontramos.

    Desafortunadamente opino, que nuestra evolución no ha sido nada correcta y, del mismo modo, nada eficiente, buena y esplendida, después de todo, somos capaces de crear unas espectaculares tecnologías, electrodomésticos y toda clase de aparatos y artilugios y seguimos mirando a las mujeres de tal modo, que si su aspecto físico no es el “adecuado”, somos capaces de menospreciar e insultar, como si acaso no fuésemos todos iguales, algo que muchos defienden, pero después no es llevado a la práctica.

    Me repugna y me avergüenza que siga viendo personas a mi alrededor, cercanas a mi, que piensen y expresen abiertamente, “YO NUNCA SALDRÍA CON UNA CHICA GORDA”, sin pensar realmente en las consecuencias que ello conlleva, chicas que llegan a crearse enfermedades y destrozan sus vidas debido a comentarios tan absolutamente absurdos como este. Nuestra sociedad debería aprender de una vez por todas que cada persona es única y especial, y el aspecto físico no es importante, cada uno debe sentirse bien consigo mismo, si conseguimos eso, las opiniones de los demás dejarán de importar.

    Fátima Mª Fdez Vázquez 1ºB

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  22. Ni si quiera he podido acabar de ver el vídeo. En fin. Vivimos en una sociedad en la que estamos demasiados condicionados con la imagen, y es la misma para todas nosotras y la misma para todos ellos, y lo gracioso es, que cada uno es diferente, rubio/a, pelirrojos/as, altos/as, bajitos/as, gordos/as... Y un largo punto suspensivo, porque nadie es igual, y en el fondo tampoco queremos serlo, pienso que a cada uno le gusta (y además lo es) ser único y diferente. ¿Os imagináis a todas las mujeres midiendo 1'65 o 1,70, con grandes senos y culo, pero sin ningún michelín claro? ¿Y a todos los hombres con la misma altura, altos, fuertes y corpulentos? Sería extraño no creéis? Pero aún así todos queremos estar dentro de esas medida, que son simples números que no deberían aportar ninguna felicidad, pero todos nos queremos ver guapos, pero ¿y por qué ser guapo significa estar dentro de esas medidas? Me gustaría saber quién y por qué dictó esas medidas infernales para la sociedad, que solo se consiguen sufriendo, pasando hambre y gastando el dinero en gimnasios y operaciones de aumentos de senos, labios, reducción de nariz, liposucciones...
    Cada uno es diferente, y deberíamos querernos tal y como somos, cuidándonos siempre eso sí, pero amando nuestro cuerpo, amando esas "imperfecciones" que tenemos, los michelines de más... Nuestro cuerpo es totalmente único, y sólo nos tenemos que preocupar de que eso no cambie, de que nos guste a nosotros mismos, y si eso es así, entonces con esa confianza que trasmitimos a los demás también les gustará.


    Belén López-Pozas Gómez 1A

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