El pasado martes 9 de noviembre, tuvieron lugar las elecciones americanas después de 8 años de candidatura de Obama, en las cuales se votaba al candidato para los próximos cuatro. Las encuestas subían y bajaban; se decantaban por un bando pero a las semanas por el otro. Rayos de luz, trapos de última hora o algún que otro asunto escondido entre sombras han hecho de la campaña un sinvivir hasta el último momento. Todo estaba pendiente de un fino hilo, a pesar de que uno de los extremos estuviese contra todo valor humano básico.
Esta entrada al fin y al cabo es un mero intento de reflejo de la situación actual americana y lo que ella conlleva. Cómo es la figura del mandatario inminente y sus ideales, que a partir de ahora 'representará' a aquella que todos conocemos como la primera potencia mundial los próximos 48 meses. En efecto, se trata de ese señor mayor, rubio, de cara anaranjada y arrugada, descendiente de inmigrantes alemanes y escoceses, ya con problemas de conducta a los 13 años que le llevaron a expulsiones de colegios. Donald John Trump. Empresario. Rico. Visionario. Ambicioso. Incumplidor de pagos salariales. Declarado en quiebra hasta en seis ocasiones. Más de tres mil 500 demandas en las últimas tres décadas. Si, este es el candidato (ya ganador) a presidencia, el cual presume siempre de sus valores empresariales como mejor virtud propia.
Por duro que suene, metamos en una batidora machismo, homofobia, xenofobia, racismo, estafa, vicio, entre otros. Obtendremos al presidente de los Estados Unidos de América.
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'Cuando México envía su gente...están trayendo drogas, están trayendo
crimen, están trayendo violadores y algunos, asumo, que son buena gente.'
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Autor de brutales acusaciones que no dejan a nadie indiferente. En su lista no podrían faltar nombres como Obama, Hillary o ya menos conocidos pero no menos importantes como son John Mc Cain o la ex Miss Universo Alicia Machado, participante latina de un concurso de belleza a la cual Trump llamó 'Miss tareas domésticas'. Sobran explicaciones.
Partidario de barbaridades tales como el movimiento birther, por el cual dudaba del verdadero lugar de nacimiento de Barack Obama; o la brutal acusación por parte del republicano de que el actual ex presidente es el fundador del grupo yihadista ISIS utilizando el acrónimo del EI. “Él es el fundador de Isis, ¿entienden?”, “¡Él es el fundador! Él fundó Isis. Y yo diría, que la cofundadora podría ser la retorcida Hillary Clinton”, refiriéndose a su oponente, a la que amenazó con meter en la cárcel en el segundo debate anterior a la elecciones. Los oídos de la demócrata fueron regalados con recriminaciones en las que la falta de temperamento era la protagonista. Trump afirmaba que su oponente no tenía el suficiente aguante para semejante cargo, declaración que no encaja del todo con la secretaria de Estado de 2009 a 2013; senadora junior de los Estados Unidos que representó a Nueva York de 2001 a 2009; primera dama de los Estados Unidos de 1993 a 2001 y primera dama de Arkansas de 1983 a 1992; además de su título de la Facultad de Derecho de Yale y sus estudios de posgrado.
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'Si Hillary Clinton no puede satisfacer a su marido qué le hace pensar que puede satisfacer América'
Citaba el actual presidente haciendo referencia a la infidelidad que esta sufrió por parte de su marido Bill Clinton.
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Nunca una figura pública ha tenido un historial machista tan extenso. Desde alusiones a las mujeres como 'cerdas', 'gandules' o 'perras', hasta declaraciones como que el embarazo es una molestia para los trabajadores, que toda persona que aborte debería ser castigada o que este género no se merece la misma retribución a no ser que trabajen tan bien como los hombres. Sin olvidar de haber sido acusado por 12 mujeres de cometer asaltos sexuales, defendiéndose a sí mismo con expresiones tales como 'no eran lo suficientemente atractivas para mí como para cometer dichos asaltos'. A veces creo que en el acercamiento lento pero progresivo de la igualdad; a veces creo que hay esperanza; a veces creo en el género masculino. Luego escucho a este hombre y se me pasa.
Cuenta la leyenda que si hubiera que elegir a la figura más poderosa del mundo sería la que estuviera en la presidencia de los Estados Unidos. En qué mundo viviremos si semejante puesto actualmente lo ocupa un defensor de que haya más armas nucleares en los países. Un hipócrita que critica el supuesto peligro de su país cuando las tasas actuales de inmigrantes y crímenes son las más bajas en décadas. Un temerario que afirma que reforzaría el ejército para cometer crímenes de guerra. Un intolerante que quiere prohibir la entrada de musulmanes. Un hombre que se describe como inteligente, pero luego testifica que el cambio climático es un bulo creado por China. Un hombre rico, pero luego no paga impuestos federales. Un hombre que quiere 'paz' para su país, pero luego apoya la invasión de Irak.
La pregunta pues que se hace todo el mundo es cómo, cómo hemos llegado hasta aquí. Analicemos qué hay detrás de cada voto. Y es que el perfil de sus apoyos es de un hombre blanco, soltero, con bajo nivel educativo y conservador. Piensan que los inmigrantes son una carga para Estados Unidos, poseen más armas, niegan la contribución del ser humano al cambio climático, creen que todos los ciudadanos tiene las mismas oportunidades económicas y consideran que el gobierno debería promover valores tradicionales en la sociedad. Sin embargo, son los menos informados y los que menos participan después de las elecciones.
¿De verdad es lo que queremos para un futuro? ¿Para nuestras familias? ¿Que nuestros hijos crezcan en una sociedad donde todos esos valores son los primordiales? Esta semana América está de luto. Mi padre siempre dice que la realidad supera a la ficción. Un apocalipsis zombi de película sería más tranquilizadora a estas alturas.
Que Dios nos coja confesados.
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Adela García Ramírez, colaboradora del grupo Aequitas25
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Coincido plenamente. Es una noticia trágica que cuestiona el sistema, que amenaza a América, Europa y al mundo y que nos fuerza a no quedarnos quietos, a defender democráticamente, con uñas y dientes la dignidad de las mujeres y hombres de este mundo porque estar amenazados por dirigentes así. Ayer este señor hablaba de millones de mexicanos como de fardos de material agrícola para deportar, encarcelar o hacer lo que le venga en gana. Es inadmisible. NO, MR. TRUMP!!!
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ResponderEliminarEra demasiado bonito para ser cierto. Después de que Estados Unidos eligiera por primera vez un presidente de color, un golpe bajo al racismo, era ya mucho pedir derrumbar el machismo para que ganara por primera vez una mujer. Nos guste o no Hillary Clinton era la persona más preparada para asumir este alto cargo y las encuestas le daban una clara ventaja. Tras años en política y después de haber “apoyado” a su marido cuando era presidente, aunque se rumorea que la que gobernaba era ella, no era lo suficientemente buena como para convertirse en la primera mujer en gobernar el país más poderoso del mundo en la actualidad. Obviamente, era mejor un magnate ignorante que todo lo consigue a base de dinero y las perlas que salen de su boca y de su cuenta de Twitter. Si una mujer como ella no lo ha conseguido contra un hombre… así, falta aún mucho por hacer para cambiar las cosas.
¿Pero por qué nos extraña su victoria? Donald Trump es un hombre de pensamiento retrógrado que dice y hace públicamente la primera barbaridad que se le cruza por la mente. Los otros políticos simplemente lo dicen en privado y sueñan con hacer lo que piensan. Donald Trump no es muy diferente al resto de presidentes anteriores de la gran potencia mundial, como George Bush, solo que este no iba insultando a colectivos en programas de televisión. El nuevo líder nos choca porque nos hemos malacostumbrado a Barack Obama, si no el mejor, uno de los mejores presidentes que Estados Unidos ha jamás tenido. Quizás se nos había olvidado que aquel es un país extremista, donde conviven los descendientes de refugiados, esclavos y radicales religiosos expulsados de Europa allá por el siglo XVII. Todos inmigrantes, porque lo que son indígenas quedan bastantes pocos.
Tampoco es que nosotros seamos muy moderados ciertamente. La mayoría de este país vota a un partido político (bastante) de derechas que ha sido demostrado corrupto prácticamente en su totalidad y que ha probado en numerosas ocasiones que lo que quiere gobernar es un rebaño de ovejas ignorantes que acepten lo que venga. Unos corderitos mansos que acepten su matanza “por un bien mayor”: que ellos tengan su cena servida, no vayan a quejarse sus estómagos. Y nos creíamos progresistas. Hasta el PSOE, que en la Segunda República era realmente un partido socialista, se ha moderado, incluso llegando a entrar en zona de derechas. Si no nos gobierna un partido de extrema derecha es porque aún tenemos dentro el miedo al franquismo, que no hemos superado, porque sigue siendo un tema tabú. Siendo honestos, todos sabemos que el PP no es más que los restos del gobierno de la dictadura, y si no se radicaliza es por miedo a represalias.
Volviendo a Trump, nos sorprende que con su ignorancia haya llegado al puesto popularmente designado como “rey del mundo”, siendo la mayor parte de sus votantes ciudadanos que apenas terminaron el instituto. Pero también nuestro presidente nos regala una frase cada semana, para que tengamos algo por lo que reír, porque lo que es su política no le hace mucha gracia a nadie. También el ex-ministro Soria soltó aquel disparate de que el Meridiano de Greenwich pasa por Canarias, por lo que la hora en España era correcta, siendo él de estas islas. Por si acaso, recuerdo que este famoso meridiano pasa por Barcelona y que “parece pasar” por Canarias cuando se añaden las islas al mapa de la Península en su conocido rectángulo, debido a su lejanía. Tampoco debería asombrarnos que triunfen sus comentarios machistas (siéndolo también sus votantes), aquí los piensan muchos y los dicen unos pocos. “La mayor parte de las denuncias (de violencia de género) son falsas”; “Las leyes, como las mujeres, están para violarlas”; “(Una política) estaría mejor haciendo punto de cruz” y “muchas han tenido que chupar (aclaración innecesaria) para estar donde están” son solo algunos ejemplos de docenas.
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ResponderEliminarDe todas formas, su comportamiento parece haberse suavizado en las últimas dos semanas. Lo que demuestra de nuevo la cobardía de este candidato. “Perro ladrador, poco mordedor”. Por una parte, por lo pronto, no tocará la reforma sanitaria de Obama, y el muro con México ya es una valla. Acabará siendo una valla para ganado, de un metro de altura, que solo no se la puede saltar un niño y este la podrá atravesar entre dos maderas. Otra valla que a nadie parece recordarle a las que nosotros mismos tenemos en Ceuta y Melilla, precisamente con la misma función. Por otra parte, su trato hacia Clinton (así como a otros políticos), con su ya famoso “nasty woman”, parece que fue diferente antes, cuando la llamaba “wonderful woman”, lo que no parece más que afirmar que toda la campaña no fue para él más que un espectáculo, donde mentiras y falsas promesas eran el pronóstico diario. Quizás su cobardía se deba a que vive en un país lleno de armas, derecho que apoya, y no sería el primer presidente que acaba con varias balas en el pecho porque su política no agradaba del todo a sus ciudadanos.
Por ahora, parece que al menos a la mayor parte de los jóvenes de las grandes ciudades no parece gustarles este empresario como presidente. No tardaron en echarse a las calles y parece que ahí seguirán durante un tiempo, hasta que se cansen o hasta que los acaben echando a patadas, porque Donald Trump no está dispuesto a renunciar a su trono. Lo nunca visto antes en este país, donde el presidente es sagrado. Con suerte, dentro de unos años, serán ellos los que tengan los votos decisivos para elegir a un candidato algo más respetable y adecuado. Aunque también es cierto que, con la edad, la gente se modera. Y la historia puede que tenga que repetirse de nuevo.
Lo peor es que esto no está pasando solo en Estados Unidos, aquí ya sabemos que ganó Rajoy, en Gran Bretaña se impuso el Brexit y no sería de extrañar que Marie Le Pen fuera la próxima en hacerse con Francia. El planeta está sucumbiendo ante la derecha, la extrema derecha, que parece imparable. ¿Seremos capaces de frenarlo o el mundo seguirá oscilando de extremo a extremo y pronto nos volveremos todos comunistas hasta que toque volver a empezar? O se detiene o acabará con todos nosotros, pero de eso aún no nos hemos dado cuenta.
Como ya sabemos y tu bien dices, Donald Trump ha ganado las elecciones. Mi más sentido pésame a todas aquellas personas que creían en la buena política porque esta acaba de morir. Digo esto porque la victoria de este naranjito con peluca es la prueba viviente de la más progresiva decadencia del mundo actual, que desciende hacia el abismo llevándose consigo al poco raciocinio que le quedaba al ser humano.
ResponderEliminarDonald Trump, el presidente más cateto y patético del mundo actual, un hombre que no cree en la igualdad, en el calentamiento global ni en el sexo opuesto como tu bien dices, un hombre que sobrepasa los límites de lo racional, así es el nuevo presidente de los Estados Unidos de América, él es el presidente “definitivo”. Últimamente no he hecho más que ver en titulares y redes sociales artículos y temas relacionados con Trump, Hilary y las elecciones americanas, las cuales, a mi modo de ver, pasaron de ser unas elecciones a un reality show. Todo comenzó en aquel emocionante debate en el cual participaron, además de los dos candidatos, una serie de señoras que afirmaban haber sido violadas por el marido de Hilary. Mis más sinceras felicitaciones señor Trump, gracias a este entre otros escándalos que usó contra su oponente ha conseguido hacerse con la victoria, es usted un autentico manipulador.
A lo que me he referido con anterioridad, es que no entra en mi cabeza como la principal potencia mundial puede haber acabado gobernada por este personajillo anaranjado el cual, como si de una caja de pandora se tratase, encarna cada mal presente en el ser humano. Si me pongo alarmista diría que este hombre es capaz de tirar de un plomazo todos los pilares de la sociedad, pero siendo realistas eso no ocurrirá, ya que él, al igual que muchos políticos actuales se rascará su panza envuelta en tela cara mientras observa las paredes de su despacho en la cumbre de la sociedad, anteriormente ocupado por personas honorables pero ahora por un payaso.
Finalmente debo reconocer que yo ya he perdido la fe en el ser humano el cual, a excepción de unos pocos individuos, desprecia a sus iguales, acapara todo para sí solo, engaña, manipula y corroe al mundo. Ya no puedo más, pena me dan los niños pequeños que pasean con sus padres, puros y llenos de felicidad, que cuando crezcan tendrán que enfrentar a una realidad totalmente injusta donde el rico, el manipulador y el cateto serán líderes mientras que el trabajador, el humilde y el educado intelectual serán herramientas de usar y tirar. Porque eso es lo que encarna la victoria de Trump, una sociedad injusta y desgastada.
Javier Solís Ron 2º Bachillerato A
Desde luego la humanidad vuelve a lucirse de nuevo. Sinceramente no sé si los americanos podrán volver a decir sin pelos en la lengua que aman a su país y a su presidente, al menos hasta que pasen estos 4 años.
ResponderEliminarPero aunque pueda sonar extraño, lo realmente preocupante no es que el señor Trump, un personaje que se caracteriza por ser racista, machista, xenófobo etc, haya salido presidente de la que se supone que es la primera potencia mundial; ya que bajo mi punto de vista esto no ha sido más que un papel que él mismo se ha montado para convencer a los americanos más patriotas y nacionalistas. Lo realmente preocupante es ver como millones de personas, habitantes de uno de los países más desarrollados del mundo (aunque cada día me hacen dudar más), mujeres, jóvenes, etc, hayan votado a semejante ser con semejantes ideales. Lo realmente preocupante es ver como uno de los estados con más inmigrantes de toda América, donde el español es prácticamente una lengua oficial como es el estado de Florida haya ganado el señor Donald Trump. Lo realmente preocupante es ver como vivimos en una sociedad que parece que no avanza y en la que cada vez surgen más y más problemas.
Es una pena que la política se esté convirtiendo en un circo, y que el prestigio de los políticos y la confianza hacia ellos sea cada vez menos; se están perdiendo los verdaderos valores de este oficio y se están desperdiciando verdaderos talentos y personas realmente cualificadas para este puesto.
Pero yo soy de los que siempre trato de sacar algo positivo de estas situaciones; cabe la posibilidad que podamos pasar 4 años de vergüenza, de sufrimiento y de dolor, pero es posible que esto pueda hacernos escarmentar y replantearnos que es lo mejor para nuestra sociedad. O puede que volvamos a pegarnos otra espectacular hostia. Después de lo ocurrido este año, quién sabe...
Pablo Gordillo Fdez 2º Bachillerato A
Y cuando llegue el día del último viaje,
ResponderEliminary esté al partir la nave que nunca ha de tornar,
me encontraréis a bordo ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar.
Antonio Machado (1875-1939), poeta exiliado durante la Guerra Civil.
Marine Le Pen (Francia), Geert Wilders (Holanda), Gianluca Iannone (Italia), Nikis Michaloliakos (Grecia)… Nombres directamente relacionados con la ultraderecha y el populismo europeo desde hace escasamente dos o tres años. Excusándose en que los emigrantes son los culpables de quitarles el trabajo y de ponerles bombas en cada baldosa que pisan, la polarización de la derecha europea está comenzando a marcar la política occidental de la mano de estos candidatos a la presidencia de sus respectivos países.
Motivados por ese miedo, los ciudadanos se dejan guiar por el populismo que, al fin y al cabo, es simplemente un efecto temporal para un pueblo asustado; la solución más sencilla y barata cuyo único objetivo es encontrar una justificación política para recortar derechos y libertades. Sin embargo, el problema no es que existan personas del calibre de Marine Le Pen; sino que estas mismas sean votadas y tengan verdaderas oportunidades de ser elegidos como presidentes de sus distintos países: que haya un sentimiento común.
Es entonces cuando podemos hablar de que la sociedad es egoísta. Cegados por un cerrado nacionalismo, los ciudadanos están pensando exclusivamente en su país, cerrando fronteras y haciendo oídos sordos a cualquier problema ajeno a su nación. Cierto es que la economía no va bien, por lo menos en comparación con diez años atrás. ¿El problema? Los emigrantes. ¿La solución? Cerrar fronteras. Vulgarmente hablando, una situación similar está pasando al otro lado del charco. El propio Santiago Segura lo advirtió con el caso del singular presidente de los Estados Unidos: “Comparado con Donald Trump, Torrente es solo un chiste”. La realidad supera la ficción.
Incidiendo un poco más en la cuestión de los refugiados, cabe destacar que Líbano, un país con una extensión similar a la provincia de Sevilla, ha acogido a más de un millón de refugiados; los cuales son en su mayoría familias y niños que intentan huir de la barbarie que están sufriendo en su país, en su barrio e, inclusive, en sus propias casas. La otra cara de la moneda es Europa. El primer mundo. Donde el mayor ruido que puedes escuchar por la noche es el camión de basura si tienes la mala fortuna de vivir justo encima de un contenedor.
Dicho esto, deberíamos hacer una importante reflexión cuando un pequeño país del tamaño de una provincia acoge (y sigue acogiendo) a un millón de personas ajenas a sus tradiciones, costumbres, etc...y nosotros, pobre de nosotros, llevamos años negociando y haciendo cumbres para dar asilo a 160 000 refugiados repartidos entre todos los países de la UE. La pregunta es: ¿qué haríais vosotros si, en vez de escuchar un camión puntual todas las mañanas 5 minutos antes de que suene el despertador, os despertaseis a las 2,3,4 o 5 de la mañana porque están bombardeando, con suerte, la manzana de al lado? ¿ En qué olvidado cajón se encuentran esos legítimos y democráticos valores de los que ha estado la UE fanfarroneando y predicando prácticamente desde que se fundó? ¿Qué hubiese sido de nosotros si, durante la guerra civil, Argentina, México o Alemania nos hubiese cerrado sus puertas?
No se si es problema político o social; posiblemente una mezcla de ambos. Pero lo cierto es que, desde el punto de vista de cualquier persona medianamente racional, algo está fallando cuando los países más pobres y con menos recursos son, con amplia diferencia, los más solidarios. Este movimiento puede parar aquí. Ya hemos visto como ha comenzado la legislatura de nuestros vecinos estadounidenses. Podemos aprender. Todavía hay tiempo de salvar grandes potencias europeas de estas ideologías que, al fin y al cabo, suponen el mayor insulto y amenaza a la palabra solidaridad y humanidad en todos los aspectos.
Marco Mena Castillo 2º Bachillerato B