Una alumna y seguidora de este blog (ya exalumna, snif...) nos
acerca un post de Sara Carbonero donde se relata una experiencia muy
impactante. La Policía Nacional se puso en contacto con ella por si quería
colaborar en una campaña de concienciación contra la trata de seres
humanos.
La
ONU define la prostitución como la tercera actividad ilegal más lucrativa del
mundo que genera ganancias cercanas a los 12 billones de dólares al año
(las dos primeras son el tráfico de armas y de drogas).
El
fenómeno de la trata de seres humanos ha sufrido un gran desarrollo sobre
todo en las últimas dos décadas. A principios de los años 80, miles de
mujeres extranjeras llegaron a Europa en busca de trabajo y mejores condiciones
de vida. Pero debido a su situación de vulnerabilidad, irregularidad y pobreza
pronto cayeron en organizaciones criminales dedicadas a la industria del
sexo. En los años 90 el fenómeno ha adquirido enormes proporciones y no ha
dejado de aumentar, aumentando también enormemente las mafias y redes dedicadas
a este negocio por los grandes beneficios que produce.
Las
Naciones Unidas, en su informe de Septiembre del 2000 cifraba en cuatro
millones las mujeres que son vendidas cada año con uno de estos tres
fines: prostitución, esclavitud o matrimonio; y en dos millones las
dedicadas al comercio sexual.
La popular presentadora se prestó inmediatamente pero quiso saber
más. Se documentó sobre el tema y acabó entrando en contacto con APRAMP (Asociación
para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida). Allí conoció a María. La historia, como he dicho al principio, es muy fuerte
pero desgraciadamente no es más que una muestra de lo que sufren muchos miles de
personas, principalmente mujeres y niñas, en el mundo. El post es largo. Su
lectura, según nuestro punto de vista, más que necesaria. Podéis leerlo aquí.