Lo repito y lo repetiré el número de veces que haga falta. Podría pasarme horas y horas hablando de cuán importante es la Historia, de la influencia que ha tenido sobre nuestros antepasados y sobre el sitio en el que vivimos, siendo su legado transmitido cuidadosamente hasta nosotros, aquí y ahora, gracias a personas que no callaron ante las atrocidades cometidas por el hombre y también las más bellas hazañas, gracias a personas que, pese a ser duramente calladas y reprimidas, tuvieron la valentía y el coraje para redactar lo irredactable, relatar lo inenarrable, difundir lo increíble o lo que no se quería creer, jugándose su propia vida para que muchos sucesos no cayeran en el olvido.
Podría pasarme horas hablando también de cómo todo lo que ha ocurrido hace más o menos tiempo hace que vivamos de una manera u otra, que actuemos de una forma específica, que sintamos lo que sentimos y que veamos la vida de la manera de la que la vemos. Podría pasarme horas hablando de cómo en este preciso instante se están produciendo tantas realidades simultáneas como estrellas vemos en el cielo, y cómo todas ellas repercutirán más tarde o más temprano en nosotros y en los futuros habitantes de este planeta de quién sabe qué manera. Así, nosotros, seamos quienes seamos y estemos cómo y dónde estemos, formamos parte de la Historia, en la que participamos tanto si actuamos como si nos quedamos parados, tanto si hablamos como si callamos, tanto si observamos a nuestro alrededor como si no vemos (o no queremos ver).
Podría, en efecto, pasarme horas hablando sobre por qué creo que deberíamos tomar conciencia sobre la importancia de la Historia, que no es de nadie sino nuestra, pero en vez de eso os voy a hacer una petición.
Ya a finales de 2 de bachillerato, a caballo entre la Semana Santa y la Feria, cuando estemos memorizando cada característica concreta de los diferentes períodos de la Historia para vomitarlos en el examen final (y algunos de nosotros también en Selectividad), pensad por favor en que cada guerra, cada conquista de un derecho, cada muerte de un inocente, cada derrota, cada victoria, cada ley derogada, han sido reales, han tenido lugar en la vida real. Aunque los métodos de estudio propuestos por algún insensible primen la mnemotecnia por encima del aprendizaje, por favor, entended. Entended que la Historia no sólo es una asignatura más que nos debemos quitar de en medio en mayo, sino una fuerza motriz sin la cuál la Humanidad sería una bestia con los ojos vendados que va dándose golpes sin ton ni son, desorientada, sin saber a dónde ir y cómo actuar.
La Humanidad con H mayúscula necesita de la Historia, también con H mayúscula. Si no sabemos de dónde venimos nunca entenderemos por qué estamos donde estamos y jamás sabremos en qué dirección debemos avanzar todos juntos como comunidad.
No permitamos que vuelvan a cometerse las atrocidades que llevan teniendo lugar tanto tiempo en este mundo. Informaos, leed, no os calléis, no permitáis que la Historia la dicten siempre los mismos, los que priman el dinero y pisotean la Humanidad. Vamos a crear un legado que nuestros descendientes se sientan orgullosos de leer en sus libros de texto, y vamos a hacerlo juntos, sin olvidar jamás los sacrificios ejercidos por nuestros antecesores y los bellos principios que nos animan hoy a seguir con la búsqueda de un mundo mejor.
Seamos parte de la Historia que querríamos estudiar.
Marina León Jiménez, colaboradora del grupo Aequitas 25
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarTras leer estas maravillosas y ciertas palabras de mi compañera Marina, nos damos cuenta de la importancia de la Historia para la humanidad en todos los aspectos y sentidos. Existen muchas teorías que la explican y que le dan distintos usos o funciones, a mi parecer efectivamente esto sucede así.
ResponderEliminarPara empezar es un recuerdo que nos influye y del cual procedemos en el presente. Nos influye, pues muchas de las decisiones que tomamos en el presente, a causa de las repercusiones de los hechos del pasado, nos condiciona en la actualidad, y por otra parte procedemos del pasado porque básicamente es ley de vida, el tiempo avanza. Estos dos conceptos son fundamentales a la hora de actuar en el presente pues si tenemos en cuenta lo sucedido en el pasado podremos aprender de sus errores y actuar correctamente en el presente.
La Historia también nos sirve para comprender las circunstancias en las que nos encontramos en la actualidad , muchos de los hechos y actuaciones que observamos hoy en día puede que se hayan repetido, es decir, que ya haya sucedido con anterioridad. Esto ocurre en cuestiones, políticas, económicas... e incluso llevándolo a un ámbito menos global, ocurre hasta en las propias familias.
En definitiva entre estos motivos y muchos mas es imprescindible conocer nuestro pasado, es por ello que el estudio de la Historia se debería generalizar en la enseñanza y se le debería de dar la importancia que merece, muchos estudiantes la rechazan y no valoran la necesidad de comprenderla, justificándose con que es una asignatura larga, pesada, odiosa de estudiar y poco útil, y como menciona mi compañera no la aprenden sino que la memorizan, perdiéndose así todo el provecho que se le puede sacar a la historia como anteriormente se ha dicho. Aunque posiblemente parte de ese odio estudiantil hacia la Historia se deba a las tradicionales maneras de enseñar esta asignatura, considero que existen otros métodos en su enseñanza que quizás puedan llevar a que los alumnos se incentiven y se percaten de su importancia. Aunque es principalmente una cuestión de concienciación negativa y de ceguera ante esta importante herramienta de la vida.
En conclusión deberíamos cambiar el concepto que tenemos de la Historia y aprovechar lo que ella nos proporciona.
Independientemente de lo bien estructurado y comentado por mi compañera Marina, a la que le gusta tanto la historia que se esta planteando estudiar hasta la carrera. Quiero citar una frase que una vez leí de Eduardo Galeano: `` los científicos dicen que estamos hechos de átomos pero a mí un pajarito me contó que estamos hechos de historias´´.
ResponderEliminarNo se bien en que momento comezarón a darme lecciones de historia, creo que lo primero que me contaron fue cuando Colón descubrió America, yo en ese momento me imaginé a Colón llegando en barco con toda su tropa y comenzando a andar por tierras las cuales nadie habia pisado aún, ya que más o menos fue lo que me contaron. Yo me senti bastante orgullosa e ilusionada por pensar que nosotros españoles fuimos capaces de crear vida en un sitio que nadie habia pisado. Año tras años fueron matizando y contandome que eso del todo ,no fue así, America ya existia y ya había habitantes en aquel supuesto lugar descubierto y que lo que hicieron fu colonizarlo por el simple hecho de que el imperio Español creciese y asi el poder y reputación de España fuera grandiosa.
A lo largo de mi periodo educativo me he ido interesando por unos temas más, otros menos, unos con más ganas otros con menos, unos los he aprobado, otros suspendidos… Pero una cosa que siempre me ha quedado clara, es que la historia no es siempre como la cuentan, quiero decir, cada uno tiene y vive su historia, y asi un gran conjunto de individuos desde el principios de los tiempos hemos ido formando una historia en conjunto. Unos con mayor interes de protagonizarlas que otros, algunos muy rebeldes y otros muy destructores, pero al fin y al cabo todos formamos parte de esto. De un conjunto enorme de detalles que luego seran contado por todas las personas, y esto lo contaran dependiendo de como lo hayan vivido, o como lo hayan entendido o como hayan querido estudiar.
La historia es muy bonita y a la misma vez muy densa, también es complicada, porque cuando crees que has acabado siempre hay algo que se te escapa. A lo mejor el que queda como héroe para unos porque ha dado honor, orgullo y satisfacion para su nación, para otros es un destructor, aniquilador y una de las personas mas crueles.
En conclusión, que estaremos llenos y rodeados de aspectos cientificos que pueden ser más o menos relevantes, pero el cientifico forma la misma parte de nuestra historia que un humanista, que tenemos que pensar, razonar y analizar bien cada pasamos que damos porque todo va a incluirse en la historia a la que pertenecemos todos.
MARIA RODRIGUEZ 2 BTO.D